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domingo, 2 de octubre de 2011

El Infierno Palestino

Mapa del Infierno Palestino (Ampliar)
Quizás no haga falta nada más que analizar con algo de detenimiento el mapa actual de Cisjordania para advertir desafortunadamente que Israel no tiene la menor intención de retirarse nunca a las fronteras de antes de 1967.
Como un pacman Israel ha ido comiendo territorio palestino, instalando y fortificando colonias por toda la región. Dice el periodista británico Robert Fisk:

"Personalmente creo que Palestina es un Estado de fantasía, imposible de crear ahora que los israelíes han robado tanto de la tierra de los árabes para su proyecto colonial. Vayan y echen un vistazo a Cisjordania, si no me creen. Las masivas colonias judías de Israel, su perniciosas restricciones a la construcción de hogares palestinos de más de un piso y el cierre de los sistemas de aguas cloacales como castigo, los “cordones sanitarios” al lado de la frontera jordana, los caminos sólo para israelíes han convertido el mapa de Cisjordania en un parabrisas aplastado de un auto chocado. A veces, sospecho que lo único que evita la existencia de “un Israel más grande” es la obstinación de los palestinos."
(Fuente: The Independent,U.K.)

Esto no es obra de la casualidad o de las circunstancias sino la consecuencia de la ejecución de un plan sistemático genocida. Es que para muchos israelíes, la mayoría de ellos, los territorios palestinos forman parte del territorio bíblico del "Gran Israel" y lo único que están haciendo al ocuparlos es recuperar las tierras que creen que ancestralmente les pertenecen y si en el camino de su gran objetivo está el pueblo palestino simplemente intentan desalojarlo.

Entonces, ¿Cómo puede ser posible la paz?. En esas condiciones, posiblemente nunca lo sea porque el plan israelí, escudado en su seguridad, lleva a la eliminación lisa y llana del pueblo palestino.
Si se repara en la situación actual y su evolución posible, Israel está en camino de lograrlo. Hay 5 millones de palestinos expulsados por Israel de sus lugares ancestrales, obligados a abandonar sus tierras, sus pertenencias y sus casas para que éstas sean demolidas o entregadas a un israelí. De estos palestinos, los palestinos de la diáspora, del exilio interminable, un tercio se encuentran dispersos en campamentos en Cisjordania, Jordania, Siria, Líbano en condiciones de vida espantosas, con la moral quebrada. Los dos tercios restantes se distribuyen en varios países árabes (Siria, Líbano, Arabia Saudita, Egipto, entre otros) y no árabes y difícilmente puedan retornar a su tierra aún cuando en algún momento Israel acepte la constitución de un estado palestino independiente.
Tanto para el estado de Israel como lamentablemente para la Autoridad Palestina, los palestinos del exilio constituyen un problema de muy difícil solución.

Niños palestinos durante una protesta
Es que Cisjordania es, para los parámetros argentinos, muy pequeña. Si se observa la escala del mapa es apenas una franja de 40 km de ancho por 150 km de largo (5860 Km2) de la cual el 60% se halla bajo control total de Israel, en ese territorio viven, incluídos los refugiados en los campos, 3.500.000 palestinos.
Gaza, bajo control de Hamas, es aún más pequeña (360 Km2), 5 Km de ancho por algo más de 30 Km de largo, en ella viven 1.500.00 palestinos y está completamente aislada del resto de territorio palestino. Hay además 1.500.000 de palestinos viviendo y trabajando en territorio israelí y 200.000 palestinos más habitan Jerusalén Este. La principal ciudad de Cisjordania es Ramallah y en ella se concentra y administra la mayor parte de la importante ayuda occidental, por ello tiene un nivel de vida superior al resto de los TPO (Territorios Palestinos Ocupados por Israel) en los que apenas se llega a la subsistencia.
Es que el pueblo palestino ha sido quebrado por la ocupación Israelí en su cotidiana forma de vida, en el acceso a la tierra cultivable y a los recursos hídricos. Quizás ver con un mayor detalle este último punto muestre hasta que niveles llega el sufrimiento del pueblo palestino, cínicamente ocultado por Obama y el desprecio del ocupante.

Escasez manifiesta de agua en las zonas palestinas
Investigaciones de diversos organismos, entre ellos Amnistía Internacional, han demostrado que la población palestina de los TPO no tiene acceso a un suministro de agua adecuado y seguro. Esto ha entorpecido sobremanera el desarrollo social y económico y negado a muchas comunidades su derecho a un nivel de vida digno. El consumo palestino de agua rara vez alcanza los 70 litros diarios por persona, muy por debajo del mínimo diario de 100 litros per cápita recomendado por la Organización Mundial de la Salud. En contraste, el consumo diario per cápita israelí es cuatro veces superior.
La desigualdad es aún más pronunciada entre las comunidades palestinas y los asentamientos israelíes ilegales establecidos en los TPO. Hay zonas de Cisjordania en las que los colonos israelíes utilizan hasta 20 veces más agua per cápita que sus vecinos palestinos.
En Gaza la situación es aún peor, entre el 90 y el 95 por ciento del suministro de agua está contaminado y no es apto para el consumo humano. Israel no permite llevar agua desde Cisjordania, y el acuífero costero se va agotando cada vez más debido a la sobreexplotación y a la contaminación de las aguas residuales. El bloqueo impide las reparaciones y la reconstrucción de las maltrechas instalaciones de la franja de Gaza por lo que la situación allí es crítica desde el punto de vista sanitario.

Impresionante asentamiento Israelí en Cisjordania
En un nuevo y extenso informe, Amnistía Internacional revela hasta qué punto el carácter discriminatorio de las políticas y prácticas hídricas de Israel niega a la población palestina su derecho de acceso al agua. Israel consume más del 80 por ciento del agua del acuífero de la montaña, principal fuente de agua subterránea de Israel y de los TPO, a la vez que restringe a sólo el 20 por ciento el acceso palestino a él.
El acuífero de la montaña es la única fuente de agua de la población palestina de Cisjordania, pero sólo una de la varias que tiene Israel, que consume también todo el agua disponible del río Jordán. Mientras que el consumo diario de agua palestino apenas alcanza los 70 litros por persona, el israelí es de más de 300 litros al día, el cuádruple.

Juegos de agua: piscina israelí en Maaleh Adunim
En algunas comunidades rurales, los palestinos sobreviven con apenas 20 litros de agua al día, el volumen mínimo recomendado para uso doméstico en las situaciones de emergencia. Entre 180.000 y 200.000 personas que viven en comunidades palestinas rurales no tienen acceso a agua corriente, y el ejército israelí con frecuencia les impide incluso recoger el agua de lluvia (llegan incluso a destruir deliberadamente los pozos). En cambio, los colonos israelíes, que viven en Cisjordania pese a violar con ello el derecho internacional, tienen cultivos de riego intensivo, exuberantes jardines y piscinas.

Los colonos, cuyo número asciende a alrededor de 450.000, disponen de cuatro veces más agua que los 3,5 millones de personas que forman la población palestina actual.
Agravando la situación la continuidad de la instalación de nuevos asentamientos judíos, a pesar de las prohibiciones reiteradas de las NU, está lejos de detenerse. Recientemente el gobierno israelí aprobó la creación de 1.110 nuevos. El pacman israelí sigue comiendo territorio palestino. Cada asentamiento es protegido por el ejército y las fuerzas de seguridad israelíes y su instalación significa aislar cada vez más a los palestinos entre sí debido a las restricciones físicas (vallas, muros,alambres de espino, torres de vigilancia, puntos de control en carreteras, etc.) y psicológicas que implican

El muro de 7 metros de altura, algo más que un símbolo
El muro serpenteante y de geometría aparentemente caprichosa que recorre toda la parte occidental de Cisjordania impide que un tío visite a su sobrino que se encuentra a solo tres calles de distancia porque el muro o alguna valla o alambre de espino se lo impide y si aún así decide hacerlo tendrá que recorrer una distancia diez veces mayor y quizás atravesar en su camino varios controles militares israelíes con el peligro potencial de ser considerado un agitador o terrorista con lo que ello implica. Actualmente hay más de 7.000 prisioneros palestinos en las cárceles de Israel. Y en cada revuelta o acción de protesta de la población agobiada las fuerzas de seguridad israelíes identifican, filman y fotografían para  luego allanar las viviendas de los que consideran líderes, sean éstos niños de apenas 12 años o ancianos y con mucha frecuencia éstos son posteriormente detenidos. El control de la población palestina por parte del ocupante es férreo y recuerda a los peores tiempos de los guettos sufridos por los mismos judios y del apartheid racial sudafricano. Y el parecido no es casual, son los mismos métodos y similares objetivos.

Incluso a los palestinos que viven cerca de una ruta transitada por los israelíes o de un asentamiento no les está permitido construir su casa de más de un piso de altura.

Dice Jorge Makarz, director de la Revista Digital Iniciativa:

"La construcción de un muro por parte de Israel no es otra cosa que un intento de cristalización de una situación de exclusión de hecho. La barrera anexiona de facto recursos agrícolas e hídricos palestinos, limita la libertad de circulación y separa a miles de palestinos de escuelas, centros de salud y puestos de trabajo. En su conjunto, los asentamientos y el muro tienen como objetivo -desconociendo los límites de 1967- la incorporación a las fronteras israelíes del 47% de la Cisjordania ya ocupada (un 10% del total de ese territorio, en donde se asientan el 88% de los colonos israelíes). De ese modo, se asegurará no sólo la continuación de los asentamientos sino también su ampliación (futura).

No habiendo ninguna otra salida en tanto prospere la actitud contraria de Israel al reconocimiento de Palestina y de continuar la política de ocupación (en los últimos días se aprobó la construcción de 1.110 nuevos asentamientos al sur de Jerusalén este), el escenario que propone ese país equivale, en definitiva, a mantener a los palestinos en condiciones de una población sin derechos, acentuando una indefendible relación de carácter netamente colonial."

Niña palestina y su bandera
La presencia del ocupante es permanente y agobiante, esto además de consecuencias prácticas las tiene psicológicas. ¿Cómo se cría un niñ@ en ese ambiente? ¿Se puede esperar que reine la paz y la convivencia entre palestinos e israelíes en esas condiciones tan asimétricas de sometimiento cotidianas?.

La situación es claramente insostenible e Israel se verá obligada en la práctica a gastar más y más recursos en el control de la población palestina.

Una salida o mejor dicho un posible punto de inflexión para comenzar a torcer esta línea fatal que solo lleva a más muerte, dolor e injusticia es el reciente pedido de reconocimiento del Estado Palestino como el Estado número 194 hecho en la ONU por el representante de la Autoridad Palestina y que es mayoritariamente apoyado por los países miembros. Ver aquí.

Pero este cambio que podría conducir a una paz duradera está lejos de concretarse, por lo menos en el corto plazo, y el principal obstáculo para su realización proviene de la actitud de los EEUU que para decirlo con una expresión conocida se ha quitado la falsa careta de mediador que ha pretendido históricamente mantener frente al conflicto y decididamente ha tomado partido por Israel, convirtiendo el problema palestino en un remedo trágico del apartheid sudafricano.(Rami G. Khouri (Daily Star, 27/9))

En su discurso en 2011 frente a la asamblea de las Naciones Unidas, Barack Obama se refirió exclusivamente a los sufrimientos del pueblo judio ignorando los sufrimientos del pueblo palestino y llamando a una negociación completamente asimétrica entre un estado ocupante y el pueblo -no un estado- ocupado, dijo en esa parte Obama:

Mahboob A. Khawaja especialista reconocido en el problema palestino, escribió bajo el título "Palestina, ahora o nunca":

“Palestina es un pueblo, una cultura y una nación que ninguna fuerza puede negar ni oprimir por muy poderosa que afirme ser; cuanto más oprimas a un pueblo, más se alzará con determinación, previsión y poder para buscar la libertad de la ocupación extranjera y de la esclavitud de unos pocos"..."Sería demasiado confiar en que EEUU haga lo que sabe que es lo correcto y vote ‘sí’ o que sea un intermediario honesto y se abstenga. Todo lo más que podemos esperar es que EEUU e Israel sean parte de una minoría muy pequeña que vote ‘no’. Ese tipo de voto fortalecerá a los palestinos y quizá asuste lo suficiente a Netanyahu para que pueda negociar con un poco de buena fe. Pero si así no fuera, las Naciones Unidas habrán declarado que los palestinos son también un pueblo; un pueblo con derechos, incluido el derecho a la soberanía plena en Cisjordania, Gaza y Jerusalén Oriental. En ese momento, la suerte está echada. La ocupación está terminando, confío, antes de que Netanyahu le haga mucho más daño… a Israel.”

Ciertamente un mensaje esperanzado y que apela a la razón, en medio de una realidad por demás sombría sintetizada por la terrible metáfora de Robert Fisk: "La tierra de los palestinos semeja el parabrisas aplastado de un auto chocado". Mientras dure la actual política agresiva y expansionista de Israel ¿Qué fronteras considerará Israel seguras? ¿Están dispuestos Israel y EEUU a propiciar la existencia de un Estado Palestino Soberano y realmente viable en lo económico y político? y, como consecuencia de ello, ¿Qué posible acuerdo de paz podrá perdurar? ¿Se logrará poner fin al terrorismo, como se declama?.

bastadeodio                                                      

5 comentarios:

  1. Tremendo post hiciste, Profe!
    Me lo llevo para consulta permanente.
    Y podríamos agregar, que Israel ha bombardeado y destrozado sistemáticamente, todo enclave productivo que levantaran los palestinos.
    Así fuera una pequeña fábrica. La bombardeaban.
    Si esto no es un genocidio, cómo llamarlo!

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  2. Desde luego Daniel que no se lo puede calificar de otra manera que no sea esa, como un genocidio. Si el estado israelí es denunciado ante el Tribunal de la Haya, cosa bastante probable, nuestro compatriota Moreno Ocampo se las va a ver en figurillas para no dar curso efectivo a la demanda.

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  3. Magistral Profe, yo mandaría a hacer un desplegable y lo repartiría entre los sionistas de mi barrio, Villa Kreplaj.

    Abrazo!

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  4. MUY BUENO, PARA ESTUDIAR, DIFUNDIR, INDIGNARSE

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